sábado, 1 de junio de 2013

LA ORUGA DE LA PUERTA DEL SOL

En cuanto la vi acabada se me ocurrió el nombre de “oruga” para la cubierta del intercambiador de la Puerta del Sol. Después comprobé que así la llamaba mucha gente, de manera que el nombre resultó acertado ya que se nos había ocurrido a muchos de manera independiente. Tiene reminiscencias de la pirámide de cristal del Louvre, pero sólo por sus materiales constructivos y por ese contrapunto entre lo moderno y lo clásico, que resulta enriquecedor para ambos estilos. Pero la pirámide es fría y estática como roca cristalina que emergiera del subsuelo, mientras que la oruga es cálida, orgánica, de curvas articuladas casi movientes. Y no estorba en el conjunto arquitectónico de la plaza, ya que ocupa un lugar discreto en un extremo de ella y sus dimensiones son contenidas.

Pero vamos a lo que vamos, y es que últimamente, desde que ocuparan la Puerta del Sol los indignados del 15-M, la oruga aparece sucia, churretosa, abandonada a su suerte. Una estructura de cristal facetada como ella requiere estar limpia, brillante e iridiscente, y al no estar así parece que hubiera sido repudiada por los servicios municipales al tratarse de un símbolo del movimiento de los indignados. Recuerdo verlos subidos y asentados en el caparazón de la oruga, que estaba completamente forrada de carteles con frases ingeniosas. Cuando fueron desalojados finalmente, se despegaron los carteles, pero no parece que se pusiera demasiado empeño en la limpieza, sino sólo en remover el papel. Y desde entonces hasta ahora, que sigue recordando con su suciedad a las fechas del desalojo de la plaza. Bueno, al menos permite evocar aquellos días excitantes en que mucha gente se echó a la calle y acampó pacíficamente en la plaza, exteriorizando su protesta contra el mal funcionamiento y corrupción de las instituciones políticas y económicas.

Y lo malo de esta pequeña historia es que todo sigue igual desde entonces, sucias las instituciones y la oruga, indiferentes a los ciudadanos y sus protestas. ¿Habrá que ocupar otra vez la plaza? Quizás por eso no han limpiado definitivamente la oruga.

No hay comentarios :

Publicar un comentario